Una buena opción es adoptar un animal abandonado en un refugio para darle una nueva oportunidad ya que son perros igualmente buenos compañeros que simplemente han tenido mala suerte y han sido tratados injustamente.
En la adquisición de un cachorro a ser posible, es muy importante poder conocer al temperamento de sus padres, especialmente de la madre y que se respete que en sus primeras 7/8 semanas de vida este conviviendo con su madre y sus hermanos de camada, esto influirá en su carácter y comportamiento futuros.
Para recién nacidos en casa, la práctica de la manipulación neonatal o estimulación temprana durante las primeras 6 semanas resulta beneficiosa para el perro que conseguirá: una mejor gestión de las emociones como el miedo y el estrés, mejor capacidad de aprendizaje y mejor resistencia a ciertas enfermedades, preparándole para el futuro.